Si en las cifras somos coincidentes con Europa, no tanto en las formas de abordar las rupturas, pues en España sigue siendo preferente la vía judicial, dejando la solución en manos de otro. La mediación apela a la responsabilidad de las personas, que tras la separación, tienen que tomar decisiones importantes la mayoría de las veces referentes a los hijos. A diferencia de los procedimientos judiciales, basados en el enfrentamiento, la mediación facilita el diálogo, para que la propia pareja, de mutuo acuerdo, decida sobre la custodia de los hijos y cómo harán frente a las necesidades económicas, atribución de la vivienda o liquidación del régimen económico. Todo ello, con la ayuda especializada que la mediación supone, y que tras las últimas reformas, posibilita la Ley 15/2005. A pesar de esta reciente reforma, muchas parejas que tienen que afrontar la ruptura, desconocen esta vía, complementaria y altamente eficaz a la que pueden acudir en cualquier momento del proceso judicial, donde cualificados profesionales del campo de la Psicología, Derecho o Trabajo Social, les ayudarán a compartir reflexiones que tengan en cuenta las necesidades del otro.
Despacho de abogados en Arona (Tenerife), Lapeña & de Benito, derecho de familia.